Como dice mi compañero, Juan, «Una WordCamp no se acaba hasta que escribes sobre ella», y he ido retrasando, un día sí, y otro también, escribir sobre la primera WordCamp celebrada en Vigo.

Las WordCamp tienen personalidad

Cuando has ido a unas cuantas WordCamp, incluso se nota en las quedadas a través de meetup, te das cuenta que son eventos que tienen una personalidad propia. Personalidad que le dan sus organizadores, en primera instancia, y que se completa con las personas que acuden al evento.

Yo, como parte del equipo, por ser la primera a la que fui, y «¡¿por qué no decirlo?!» con, quizá un pequeño conflicto de intereses, soy adorador de la de Pontevedra, es mi favorita. Pero lo cierto es que WordCamp Vigo me pareció un evento muy bien organizado, muy bien logrado, máxime teniendo en cuenta el apuro que pasaron los organizadores para preparar todo en tan poco tiempo y sin una experiencia previa en un evento como este.

Ser organizador, no es tan sencillo

Aunque sí, alguno ha sido voluntario, sé de buena tinta que no es lo mismo, que el voluntario está más relajado durante el evento. Sé que las semanas previas al evento, parece que faltan muchas cosas, con la sensación de que va a fallar algo. Es bastante estresante. Y durante el evento, como organizador, percibes fallos, algunos grandes, ¡atroces! Y la realidad, es que, incluso muchos de esos atroces, ni siquiera son percibidos por los asistentes.

I will be back…

En mi opinión, WordCamp Vigo ha sido un gran evento y me ha permitido, hacer lo que más me gusta de estos eventos: Reencontrarme con buena gente a la que aprecio, conocer gente nueva, aprender alguna cosa en alguna charla y… ¡COMER! ;-P .

Si nada lo impide y se celebra de nuevo, el año que viene volveré a dejarme caer por WordCamp Vigo.

Felicidades a los organizadores.